Dudas en el Gobierno: ¿pasar del Stand By a la sombra con FMI?

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La presencia del FMI, llamada a fomentar la austeridad, no impidió, sin embargo, que en el primer semestre de 2007 el gasto en publicidad se incrementara en un 71%.

SANTO DOMINGO, DN (República Dominicana). - Mientras el Gobierno refleja división sobre la necesidad de un nuevo acuerdo con el FMI en 2008, esta vez tipo "sombra”, las voces de la oposición política, de representantes del sector empresarial y de algunos economistas, reclaman que el país siga con el organismo multilateral.

La presencia del FMI, llamada a fomentar la austeridad, no impidió, sin embargo, que en el primer semestre de 2007 el gasto en publicidad se incrementara en un 71%.

Para justificar el nuevo acuerdo, algunos sectores argumentan sobre la necesidad de mandar una señal a la comunidad financiera internacional para que el Gobierno mantenga su compromiso con la estabilidad macroeconómica y un presupuesto equilibrado. También alegan sobre el imperativo de un control del gasto público, que ponga un límite a la capacidad del Gobierno de utilizar los recursos públicos en las elecciones del próximo año, a favor de la campaña reeleccionista del presidente Leonel Fernández.

A favor y en contra
El secretario de Hacienda, y miembro del equipo económico, Vicente Bengoa, salió en defensa de la “soberanía económica” del Estado dominicano, para oponerse a ese nuevo acuerdo, el que considera innecesario porque la economía ya ha sido saneada.

Mientras, el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, ha manifestado su opinión a favor de la continuidad del acuerdo con el Fondo. “Al país le conviene (...) evaluar la posibilidad de extenderlo dentro de las variaciones más flexibles posibles; pero siempre veo bien que el país continúe con algún tipo de acuerdo con el Fondo”, declaró el 18 de julio.

A esta opinión se han sumado la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE), el Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), economistas como Bernardo Vega y el principal candidato de la oposición Miguel Vargas Maldonado.

“Es saludable que en un año electoral contemos con ese tutelaje”, opinó Lisandro Macarrulla, presidente del CONEP.

Pese a las declaraciones de los funcionarios del Gobierno, la postura oficial es que “la decisión corresponde al presidente Leonel Fernández, que en su momento solicitará la opinión del equipo económico”, según Temístocles Montás, secretario de Economía, Planificación y Desarrollo.

Según las autoridades, el Gobierno ha cumplido con holgura las metas del programa económico, que concluirá en enero de 2008. Los antecedentes del programa con el FMI se remontan al acuerdo firmado en agosto de 2003, que se cayó tras la compra de las acciones de Unión Fenosa en de Edenorte y Edesur por parte del gobierno anterior. Con la llegada de la administración de Leonel Fernández, se firmó un nuevo programa Stand By, que permitió un retorno de la confianza y la recuperación de la estabilidad macroeconómica.

Bajo ese acuerdo, el país ha ejecutado un amplio proceso de reforma y ha mantenido tasas de crecimiento que rondan el 10%.

Salta los controles
Sin embargo, con o sin FMI, el Gobierno ha demostrado tener la capacidad de saltar los controles al gasto público, sobre todo en las coyunturas electorales. Un ejemplo fue lo sucedido en 2006, cuando se comprometió con el FMI a cerrar ese año con un déficit cero. Pero por la expansión del gasto en el primer semestre, en el marco de las elecciones congresuales y municipales, cerró con un déficit de RD$12,913.7 millones, equivalente a 1.22% del PIB.
Otro ejemplo es el primer semestre de 2007. En este período se realizaron las elecciones internas del PLD para elegir al candidato Presidencial.

Con este proceso el gasto en publicidad por parte del Gobierno ascendió a RD$1,096 millones. No debió pasar de RD$481.2 millones, según la Ley de Austeridad, que estipula una reducción de 25% respecto al monto gastado en 2005. No sólo no se redujo, sino que se incrementó en 71%.

Por estos hechos, Joel Santos, presidente de ANJE, concluye: “Se ha demostrado que la presencia del FMI no es una garantía del control del gasto, pero si de equilibrio presupuestario”.
Eso es así, porque aún cuando el Gobierno se desborde en el gasto, con el FMI, al final deberá equilibrar su presupuesto, sin importar los recortes.

Un mensaje a los mercados
Uno de los economistas vinculado al opositor PRD, Jaime Aristy Escuder, se hace eco de un documento del Citibank donde se afirma: “La no renovación del acuerdo (con el FMI) conlleva un costo y, por lo tanto, la política fiscal deberá ser más transparente y prudente en los próximos meses”. Según el economista, el Citibank es uno de los compradores extranjeros de los títulos financieros emitidos por el Banco Central. Al 27 de agosto, el total de estas emisiones ascendían a RD$179,810 millones.

Pero otro reconocido economista, Fernando Pellerano, llama la atención sobre el déficit de cuenta corriente de la balanza de pago, que a junio de 2007 ascendió a US$802 millones, como consecuencia del incremento de las importaciones, por efecto de la apreciación del peso que provoca el Banco Central con su política de determinación de la tasa de cambio. Considera como “frágil la estabilidad macroeconómica”, y recuerda: “El FMI no hace estrategias de desarrollo, es el Estado que tiene que hacerlas”.